¡Que no nos engañen y nos hagan sentir culpables!
Mitos sobre el postparto y la crianza temprana:
- El enamoramiento hacia tu bebé aparece desde el momento en el que lo conoces.
- Los bebés que toman lactancia artificial tienen un peor vínculo con sus madres.
- Coger al bebé en brazos, llevarlo en la mochila de porteo y hacer colecho lo malcrían y hacen que se vuelva dependiente.
- Dar el pecho al bebé te va a esclavizar.
- La llegada de tu bebé va a ser la época más feliz de tu vida.
Realidad sobre el postparto y la crianza temprana
- El enamoramiento hacia tu bebé puede aparecer poco a poco a medida que os vais conociendo. Si no lo sientes desde el principio, no significa que lo quieras menos o seas “peor madre”. No hay madres “peores” ni “mejores”, todas somos SUFICIENTEMENTE BUENAS para nuestros hijos.
- La lactancia artificial no va a perjudicar el vínculo con tu bebé, ya que la alimentación es un momento más de estar y cuidar de tu bebé. El biberón se puede dar con mucho amor acariciándolo, cantándole, mirándole a los ojos, etc. Vas a tener muchos otros momentos para relacionarte afectuosamente con tu bebé cuando le bañes, le cambies, le cantes o lo abraces.
- Los bebés que son porteados y colechan con sus padres de forma segura no se volverán unos “malcriados” o niños dependientes. Cuanto más pequeño es el niño, más necesita el contacto cercano con sus figuras de apego. El porteo, entre otros muchos beneficios, permite que el bebé se sienta tranquilo y seguro. El colecho, sobre todo si das lactancia materna, os va a permitir descansar mejor, ya que el bebé estará más tranquilo, llorará menos y su temperatura estará más regulada.
- La lactancia materna puede ser dura en algunos momentos, pero están de sobra demostrados los beneficios tanto para el bebé como para la madre. Al principio, cuando los bebés son más demandantes, puede resultar agotador para las madres. Evidentemente, es algo que solo vas a poder hacer tú (a no ser que hagáis lactancia materna en diferido) pero tu pareja (si la hay) puede ocuparse de muchas otras cosas.
- A pesar de que la maternidad puede ser maravillosa, algunas madres pueden sentirse tristes o ansiosas por los cambios hormonales y psicológicos que conlleva. Los psicólogos perinatales sabemos que es una etapa de mayor vulnerabilidad psicológica. No estás sola y es normal que sientas triste, desbordada o preocupada en algunos momentos. Busca apoyo de otras madres y ayuda profesional si observas que tu malestar es intenso o dura muchos días.